
Calor en el almacén
Las altas temperaturas exteriores pueden provocar daños materiales, fallos en los procesos y pérdidas de producto. La monitorización específica de la temperatura y la humedad, junto con las contramedidas adecuadas, le permiten proteger de forma fiable los procesos de su almacén incluso con el calor del verano.
Detecte problemas de temperatura en el almacén a tiempo
Cómo evitar daños por calor y fallos en las entregas
Control de la temperatura y la humedad en el almacén
Las altas temperaturas y la humedad descontrolada en verano pueden provocar graves problemas en un almacén, desde daños en las mercancías hasta riesgos para la salud del personal. Los productos sensibles a la temperatura, como los alimentos y los productos farmacéuticos, son especialmente sensibles al estrés térmico en el almacén. Sin una monitorización específica de la temperatura y las contramedidas adecuadas, existe el riesgo de pérdida de producto, fallos en la cadena de suministro y un aumento de los costes energéticos debido a un aire acondicionado ineficiente.
Las consecuencias: las mercancías dañadas o incluso destruidas reducen la satisfacción del cliente, generan quejas y retrasos en las entregas, especialmente si los defectos de calidad solo se detectan durante el envío o al llegar al cliente.
Control de temperatura y humedad en almacenes
Cómo proteger sus mercancías de forma fiable
Medidas de climatización en almacenes convencionales
Existen numerosas maneras de reducir la temperatura y la humedad en los almacenes, especialmente durante los calurosos periodos de verano. En almacenes con estructuras sencillas, la instalación de puertas con mosquiteras puede contribuir a una mejor circulación del aire. Además, los ventiladores de techo industriales de gran tamaño ayudan a distribuir el aire caliente de forma eficiente. Un sistema de aire acondicionado bien dimensionado y un aislamiento eficaz del almacén también son decisivos para garantizar una climatización estable.
Monitorización de temperatura y humedad en almacenes refrigerados y climatizados
Una climatización precisa es esencial, especialmente al almacenar alimentos perecederos o medicamentos sensibles a la temperatura. Incluso en almacenes con tecnología de climatización moderna, las temperaturas en las diferentes zonas pueden variar varios grados. Estas desviaciones, especialmente en combinación con una humedad elevada, pueden afectar la vida útil de los alimentos y comprometer la estabilidad química de los productos farmacéuticos.
Riesgos debidos a un control climático inadecuado
Las fluctuaciones de temperatura y humedad pueden provocar cambios en los principios activos de los productos farmacéuticos. El resultado: una pérdida de eficacia o, en el peor de los casos, la formación de subproductos tóxicos. Los valores límite de temperatura y humedad varían considerablemente según el tipo de producto y deben controlarse en consecuencia.
Diseño ergonómico del puesto de trabajo en condiciones de calor
Requisitos legales y obligaciones
Implementación de requisitos ergonómicos en entornos de almacén con altas temperaturas
Los puestos de trabajo ergonómicos no solo son una característica de calidad de la logística moderna de almacenes, sino que también son obligatorios por ley en Alemania. Especialmente cuando las temperaturas en los almacenes son elevadas, los empleadores están obligados a diseñar el entorno de trabajo de forma que se eviten los daños a la salud y el estrés. Esto se debe a que el calor puede provocar agotamiento, falta de concentración o, en casos extremos, incluso agotamiento por calor.
Lo que estipulan la Ley de Seguridad y Salud Laboral en el trabajo en España
La Ley 31/1995, de Prevención de Riesgos Laborales (LPRL) establece la obligación del empresario de garantizar la seguridad y salud de los trabajadores, incluyendo la prevención de riesgos ergonómicos y térmicos. El Real Decreto 39/1997, Reglamento de Servicios de Prevención, obliga a incluir los riesgos ergonómicos y ambientales en la planificación preventiva.
Condiciones ambientales específicas
El Real Decreto 486/1997 (Anexo III) fija rangos de temperatura:
- Para trabajos sedentarios (como oficina): entre 17 °C y 27 °C.
- Para trabajos ligeros (incluido esfuerzo moderado en almacenes): entre 14 °C y 25 °C, y humedad relativa entre 30 % y 70 %.
- Además, el puesto de trabajo no debe emitir calor adicional que cause molestias.
Normativa frente a temperaturas extremas
El Real Decreto-ley 4/2023, de 11 de mayo obliga a la empresa a proteger a los trabajadores durante episodios de altas temperaturas:
- Prohíbe el trabajo al aire libre cuando no se puedan garantizar condiciones seguras, especialmente en situaciones de alerta naranja o roja (≥ 37 °C).
- Exige que la planificación de riesgos tenga en cuenta las tareas, las condiciones personales y avisos meteorológicos.
Derechos de los trabajadores
Los trabajadores pueden interrumpir su tarea y abandonar el puesto si consideran que existe un riesgo grave e inminente para su salud, según la LPRL. Con alerta meteorológica (naranja o roja), la empresa debe adoptar medidas como cambio de horario, pausas, zonas de sombra, ventilación y agua fresca; si no, los empleados pueden paralizar la actividad sin pérdida salarial.
Está previsto un permiso retribuido climático (hasta 4 días) y, si persisten las condiciones insalubres, permiso sin retribución o ERTE con reconocimiento como fuerza mayor. Las sanciones a empresas por incumplimiento pueden ser muy graves, hasta casi 1 millón de euros.
Ergonomía en condiciones extremas: Resumen de las funciones
Evaluación de riesgos ergonómicos y térmicos
La evaluación debe integrar aspectos ergonómicos (postura, cargas, movimientos) y térmicos (temperatura, humedad, radiación). Para trabajos en almacén con esfuerzo físico, el Real Decreto 1561/1995 regula jornadas especiales en ambientes extremos, permitiendo reducir exposición sin pérdida salarial.
Implementaciones prácticas
Control técnico del ambiente: ventilación adecuada, reducción de calor radiante, utilización de barreras mecánicas o aislamiento de maquinaria o equipos que generen calor. En cuanto a la organización del trabajo,
- se requiere la rotación de tareas entre zonas más y menos calurosas, alternancia de actividades ligeras y pesadas,
- la aclimatación gradual, de modo que en los primeros 7‑14 días de exposición el tiempo se incremente progresivamente,
- y modificar horarios para evitar las horas más cálidas (trabajos temprano o al atardecer).
Medidas higiénicas y de protección
- Garantizar agua fresca y pausas regulares, con zonas de descanso climatizadas o ventiladas,
- Proporcionar ropa de trabajo adecuada, ligera y transpirable, y equipamiento que minimice esfuerzos,
- Formación e información: identificar síntomas de golpe de calor, signos de deshidratación o agotamiento térmico,
- Vigilancia de la salud centrada en trabajadores "especialmente sensibles" (edad ≥ 50, patologías cardiovasculares, embarazadas, obesidad, etc.)
Sistemas de refrigeración, gestión energética y optimización del almacenamiento en verano
Minimizar riesgos, aumentar la eficiencia
Generadores de reserva y sistema de refrigeración
Mantener y supervisar periódicamente los sistemas de refrigeración en losalmacenes
Los sistemas de refrigeración en los almacenes, especialmente en zonas con temperatura controlada, deben someterse a un mantenimiento y una supervisión regulares. Esto incluye la monitorización de los parámetros de funcionamiento, las pantallas de temperatura y un sistema de alarma fiable en caso de desviaciones. Esta es la única manera de garantizar la protección óptima de las mercancías sensibles a la temperatura en todo momento.
Generadores de emergencia en caso de corte de electricidad
Para minimizar el riesgo de un corte de electricidad, los almacenes deben estar equipados con generadores de emergencia. En caso de emergencia, estos garantizan que las unidades de refrigeración sigan funcionando y que no se dañen las mercancías. Es especialmente importante que los congeladores y las unidades de refrigeración se ubiquen lo más lejos posible de las zonas del edificio con mal aislamiento.
Reducir eficientemente el consumo de energía en los almacenes refrigerados
Las unidades de refrigeración y los sistemas de aire acondicionado consumen mucha energía, especialmente en verano. Sin embargo, existen numerosas maneras de reducir el consumo energético en las cámaras frigoríficas:
Medidas estructurales y aislamiento
- Las cámaras de aire frío en la entrada y salida de mercancías impiden la entrada de aire exterior caliente.
- Un buen aislamiento de los almacenes, especialmente en paredes y techos, reduce la necesidad de refrigeración.
- Las superficies de techo claras o reflectantes, así como los techos verdes, reducen la absorción de calor.
- Los árboles en los alrededores también proporcionan sombra natural.
Uso inteligente de la energía con energía fotovoltaica
Los sistemas de almacenamiento de calor, en combinación con sistemas fotovoltaicos, permiten utilizar la energía generada específicamente para operaciones de refrigeración. Esto puede reducir los picos de energía en verano hasta en un 90 % y disminuir los costes operativos.
Deshumidificadores para un mayor confort climático y eficiencia
El uso combinado de sistemas de aire acondicionado y deshumidificadores puede reducir significativamente la temperatura percibida. La menor humedad no solo mejora el bienestar de los empleados, sino que también reduce el consumo energético del sistema de aire acondicionado, lo que supone una ventaja para la rentabilidad del aire acondicionado en almacenes.
Control de inventario: enfríe menos, almacene con mayor eficiencia
Otra estrategia para reducir las necesidades de refrigeración es reducir el exceso de existencias. Cuantos menos productos necesiten refrigerarse, menor será el consumo de energía. Es importante planificar estratégicamente las existencias de reserva para no comprometer la capacidad de entrega.
Monitorización de la temperatura con etiquetas y contenedores adecuados
Etiquetas térmicas para monitoreo visual
Las etiquetas indicadoras térmicas cambian de color cuando se supera un límite de temperatura determinado, lo que resulta ideal para verificar productos sensibles. Las etiquetas de transferencia térmica de polipropileno, poliéster o poliamida, así como las etiquetas térmicas directas con revestimiento superficial, son adecuadas para rangos de temperatura más altos.
Cajas de almacenamiento resistentes a altas temperaturas de BITO
Las cajas y contenedores de plástico resistentes al calor son indispensables para su uso en áreas de almacenamiento con aire acondicionado o altas temperaturas. BITO ofrece una amplia gama de cajas de almacenamiento robustas y resistentes a altas temperaturas, aptas tanto para el almacenamiento como para el transporte.